¡Hubo hazaña en el inicio del Mundial de Clubes! Al Ain, el anfitrión, caía por 3-0 ante el Team Wellington, pero lo empató cerca de los 90 y se impuso en la definición por penales. El rival de River saldrá del cruce entre los árabes y los tunecinos el próximo sábado.
Vibrante arranque del Mundial de Clubes en Abu Dhabi. El Al Ain (Emiratos Arabes Unidos) igualó 3-3 frente al Team Wellington (Oceanía) y se impuso en la definición por penales.Los locales caían por 3-0, pero llegaron a la igualdad cerquita de los 90 y terminaron festejando desde los 12 pasos. Mario Barcia, jugador argentino de breve paso por nuestro país, abrió el marcador en la ciudad emiratí con un lindo zapatazo.
Atenti, River. El rival del Millo en semifinales (el partido es el martes 18, desde las 13.30) saldrá del cruce entre el Al Ain y el Esperance de Túnez del sábado próximo.
Para contextualizar sobre el nivel del partido, resulta útil echarle un vistazo a sendas formaciones titulares: 10 neozelandeses desde el arranque para el equipo de Wellington y siete emiratíes en el conjunto de Abu Dhabi. Apenas dos sudamericanos estuvieron en cancha (el argentino Barcia y el brasileño Caio), y tres europeos vieron minutos ingresando desde el banco. ¿Cómo se dio el juego?
El primer encuentro del Mundial arrancó a puro ritmo. El mediocampo lucía de transición y los dos equipos llegaban constantemente al arco rival. Se jugaban los 11 minutos cuando cayó el primero en la noche emiratí. Mario Marcia, el volante santiagueño que arribó a la nación oceánica allá por 2014, clavó un derechazo espectacular en el ángulo superior derecho del arquero Khalid Eisa.
Apenas cuatro minutos más tarde, llegó el segundo para el conjunto neozelandés. Sería obra de Aaron Clapham. El trámite del juego continuaba siendo de ida y vuelta, pero el Al Ain fallaba en los metros finales y el marcador era un fiel reflejo de ello. El VAR tendría su primera gran aparición para anular un tanto de Caio, a raíz de una supuesta infracción en la mitad de la cancha.
Para el colmo de los árabes, Mario Ilich estiró el resultado en el minuto 44 y el partido ya pintaba para goleada cómoda. No sería así. Sobre el cierre de esa primera mitad, el cuadro local consiguió el descuento (como agua en el desierto). El japonés Tsukasa Shiotani convirtió el 1-3 para ir al descanso.
El complemento no decepcionó a los espectadores. Jugadas rápidas, ataques directos y llegadas profundas. El Team Wellington, a los cuatro minutos, descontó nuevamente a través del africano Tongo Doumbia. A partir de ese momento, los locales crecieron en volumen de juego y los de Oceanía comenzaron a relegar varios metros de terreno para refugiarse más cerquita del 1 de Nueva Zelanda.
El ingreso de Marcus Berg, delantero sueco con presencia en Rusia 2018, marcó un punto bisagra en el partido. El punta nórdico estableció cifras definitivas cerquita de los 90 y llevó las cosas a la prórroga.
El Al Ain tuvo una chance clarita cuando amanecía el tiempo suplementario. Luego el trámite se enfriaría y ambos equipos parecían, de a poco, enamorarse del empate. Ya sobre el cierre, Mohammed Abdulrahman (Al Ain) vio la tarjeta roja por una entrada fuerte e innecesaria. No hubo cambios en el marcador. 3-3 y a los penales…
La definición fue para los de Medio Oriente. Berg, sorpresivamente, erró el segundo, pateando por encima del travesaño. Pero su arquero tapó el penal siguiente y las cosas se mantenían iguales. El final se dio en el comienzo de la muerte súbita. Tras la tanda de los primeros cinco, ambos habían metido tres, pero el Al Ain no falló en el sexto y el Wellington lo despilfarró. Pasaje a cuartos de final para los árabes. Se viene el Esperance de Túnez…
